Central Park...

Central Park fue el primer parque público de Estados Unidos y mide alrededor de 341 hectáreas  (4Km de largo por 800 metros de ancho). En su construcción trabajaron más de 20.000 personas, principalmente inmigrantes y se inauguró en el 1859.   Está lleno de fuentes, lagos, pistas deportivas y sobre todo de 93 Km de pistas y caminos que le hacen ser un autentico paraíso para los amantes del running.

La entrada al parque.

Corredores por todos lados.

El famoso lago

Hace algún tiempo que teníamos previsto visitar Nueva York y este año aprovechando las vacaciones de verano, nos lo hemos regalado, disfrutándolo con mi mujer y mis hijos.  Cuando  cerré  el viaje, lo primero que se me vino a la cabeza, al margen de visitar tantas cosas en la gran manzana, fue el no dejar pasar la oportunidad de correr por la ciudad y sobre todo en Central Park. Mi mujer decía que no estaba muy bien de la cabeza, pero lo primero que metí en la maleta fueron mis saucony, el garmin y la ropa de correr.  Al cuarto día de encontrarnos en Nueva York, muy temprano sobre las seis de la mañana, enfilé la octava avenida que es donde teníamos el hotel,  hasta Culumbus circle, que es una plaza en las que convergen varias avenidas con la famosa Broadway. Por aquí  es por donde entra la maratón de NY en el parque para llegar en su último tramo a  la meta.  Una vez que llego, me olvido de tiempos y distancias y lo que más deseo es  disfrutar de este maravilloso e inigualable entorno. Penetro por el acceso  y de pronto me veo rodeado a pesar de lo temprano que es, de una multitud de gente corriendo y en bici.  Había leído que son más  mujeres  que hombres los que suelen correr,  la primera impresión me lo confirmó. El numero de féminas era superior, había corredores de todas las edades y mucha gente mayor. Correr por aquí es una  autentica delicia, observar como  poco poco iba saliendo el sol entre la arboleda y los enormes edificios que rodean al parque no tiene precio. De momento continuo por una de las principales vías asfaltadas  rumbo al “Jacqueline Kennedy Onassis Reservoir” un inmenso lago artificial que se encuentra en el centro del parque y del que tanto hemos visto en películas y series en la tele. Este lago está rodeado por un anillo de tierra y es la zona donde se concentran  más corredores. Tomo este  camino en el cual se va divisando siempre en el lado opuesto la majestuosidad de los  inmenso  edificios que rodean la zona. Cuando termino de casi recorrer todo el perímetro del lago  tomo de nuevo la anterior vía y me dirijo al punto  de partida, saliendo por la séptima avenida, pasando por Time Square y de aquí al hotel recorriendo algo menos de 10 Km. Ha sido increíble el haber corrido por este fantástico lugar, el autentico pulmón verde de la ciudad donde he disfrutado como nunca de esta maravilla que tantas veces  hemos visto en las pantallas. No aun satisfecho, al día siguiente y ya con las piernas cargadísimas de recorrer Manhattan, decidí  madrugar y volver a sentir las mismas sensaciones que el día anterior. Esta vez el recorrido fue de 15 Km. y recorrí prácticamente todo el parque a la vez que me introduje en las entrañas, por zonas que parecían que habían salido de una película de fantasía. Qué bonita experiencia haber corrido por  este lugar inigualable. Algún día si puedo correré  el maratón…. Tiene que ser la leche…

Una ardilla en el camino.

Por Time Square.